Los borjanos ya pueden 'engordar' un plan de ahorro con sus compras cotidianas

Pensumo, un innovador sistema de fidelización comercial 'made in' Aragón, cambia los habituales puntos y descuentos por dinero contante y sonante. Ya está funcionando en Borja.

Un pequeño comercio aragonés.. J. BLASCO

"¿Qué es lo mejor que se le puede dar al cliente de un comercio?", pensaron un buen día los responsables de la empresa aragonesa Pensumo. ¿Puntos? ¿Descuentos? ¿Vales regalo? "No", se dijeron, "lo mejor es darle una cantidad de dinero de la que podrá disponer en el futuro, cuando se jubile, cuando más lo necesite". Y con esta idea en la cabeza se pusieron manos a la obra.

Han sido varios años de estudios e intenso trabajo en los que el proyecto ha sufrido algunas modificaciones pero José Luis Orós, padre intelectual de la idea y CEO de Pensumo, y sus colaboradores ya han visto cómo su proyecto se convertía en realidad. El escenario elegido ha sido la localidad de Borja (Zaragoza). Allí ha comenzado a realizarse una prueba piloto que se extenderá hasta finales del mes de diciembre. Comercios borjanos de todo tipo (alimentación, gasolina, moda, ocio, hostelería...) participan en la experiencia.

"En un primer momento pensamos en vincular este sistema de fidelización a un plan de pensiones pero era más complicado y además a la gente podía echarle para atrás eso de tener el dinero inmovilizado durante tanto tiempo". explica Orós. "Por eso optamos por la idea del plan de ahorro", añade.

El cliente que tenga una cuenta en Pensumo podrá disponer de su dinero en el momento que quiera, aunque tendrá que tener algunos aspectos en cuenta, porque el plan de ahorro [consulte las condiciones establecidas] va vinculado a un calendario. Cada cinco años, se podrá disponer del dinero acumulado por las compras y de los intereses que este haya generado al completo. Si antes de ese periodo el consumidor quiere disponer del dinero se le penalizará, pero siempre en intereses, nunca en capital.

 "Los productos se pagan como toda la vida", explica Orós. En metálico, con tarjeta... Lo único que tiene que hacer el cliente es facilitar su tarjeta de cliente Pensumo tras abonar la cuenta. El comercio entonces cargará en el sistema el 3% de bonificación de la compra realizada. "A través de la web, el cliente podrá consultar en todo momento cuánto dinero tiene en su cuenta e incluso podrá utilizar un simulador para saber cuánto podría ahorrar en el futuro", comenta el CEO.

Bueno para el cliente... y para el negocio

"Pensumo es también una diferenciación para el comercio, un argumento de fidelización muy potente para el pequeño comercio", indica Orós, que añade que este sistema se ha pensado exclusivamente para el pequeño comercio. "Las grandes superficies tienen la infraestructura necesaria para implantar este tipo de sistema, no obstante si alguna se pusiera en contacto con nosotros le diseñaríamos un sistema con algunas modificaciones", explica el CEO.

Al añadirse a la red de fidelización, los comercios firman un pliego de condiciones que se pueden romper en cualquier momento: la vinculación del comercio con este sistema no es vitalicia, aclara Orós. "En este proyecto es muy importante la responsabilidad social corporativa. Vamos a exigir a los comercios de la red que firmen un código de buenas prácticas, como que si venden marcas sean verdaderas o que en los procesos de fabricación no hayan intervenidos niños", abunda.

Pensumo se presenta este viernes en sociedad y para este fin de semana ha preparado un completo calendario de actividades en Borja con visitas culturales, catas de vino de la D.O. Campo de Borja, teatro... Incluso está previsto que Arturo Aliaga, consejero de Industria del Gobierno de Aragón, asista a los actos programados para el sábado por la mañana.

El equipo de Pensumo ya trabaja para implantarse en Zaragoza en 2014. Después de la capital aragonesa llegará el turno de Vitoria.